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Doña
Concepción Cáceres Jurado nace en Puente-Genil a finales del siglo XIX, de
profesión matrona y vinculada a la política de izquierdas, fallece en 1936 a
raíz de los sucesos de la guerra civil.
En el recuerdo de la sabiduría popular, encontramos que ejerció de matrona
titulada en nuestra localidad, siendo muy reconocida su labor. Además le
gustaba la política de izquierdas, donde reivindico los derechos de los
obreros, en especial de Puente-Genil.
Gracias a su formación, cultura y una innegable capacidad de liderazgo y de
comunicación, se convirtió en una hábil oradora, protagonizó mítines en los
que apoyaba y dirigía a los más desfavorecidos para que lucharan por sus
derechos. Llegando a denominarla “La Pasionaria” de Puente Genil, por el
parecido carácter y tono que usaban ambas mujeres en sus discursos
políticos.
Al declararse victoriosa la Segunda República en 1931, Doña Concepción
decidió vestirse con la bandera republicana y pasear por las calles de
Puente-Genil para manifestar su alegría, por el triunfo de la democracia y
la igualdad. Más tarde en las elecciones municipales del 12 de abril del
mismo año su marido Don Marcos Deza Montero, es elegido concejal de
Puente-Genil, hecho que le facilita la relación con la actividad política.
Doña Concepción practicó su carácter liberal y socialista con los vecinos y
vecinas de su pueblo, para transmitir sus ideales, de que todos somos
iguales y merecemos los mismos derechos. Supo aprovechar su buena reputación
profesional como matrona, atendía a las señoras acomodadas a las que cobraba
bastante bien, para poder permitirse no cobrar a las señoras más
desfavorecidas, incluso llegaba a regalarles la canastilla para el bebé a
las más necesitadas. También ejerció de trabajadora social.
Vivía en Plaza de Lara, nº 4, donde realizaba reuniones políticas del
momento, convirtiéndose su casa en un punto de encuentro, además la
visitaban los pobres y desfavorecidos socialmente, para pedir alimento, que
Doña Concepción repartía con gusto.
El 1 de agosto de 1936 entraron las tropas a Puente-Genil, encabezadas por
el Coronel Castejón y al llegar a la Plaza de Lara, entre otros fue
arrestada Doña Concepción, acusada de ser socialista, y condenándola a
muerte por sus ideales, para ser seguidamente fusilada. Su marido que en ese
momento solo tenía 39 años y tuvo más suerte, ya que consiguió escapar
huyendo a Málaga.
Este es el trágico final de mujer, dedicada a la mejora de los derechos de
una sociedad y de su prójimo más cercano.
Fuente:
Asociación de Vecinos La Pitilla
http://lapitilla.com
http://www.lapitilla.com/Calles/20Concepcion.html
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