Camarín del Señor de la Humildad y Paciencia

Iglesia de la Asunción del ex convento de San Francisco de Puente Genil

         Entre las disposiciones testamentarias establecidas por el canónigo doctoral de la Catedral de Sevilla, Francisco Gil de Melgar (1570-1640), destaca la dotación de una importante cantidad de dinero para el establecimiento en la entonces Puente de Don Gonzalo de un convento de franciscanos descalzos. Tras un primer establecimiento en 1644 en la Veracruz, en el año 1649 comienzan la construcción del definitivo convento en la entrada de la calle Aguilar, en el lugar conocido como Cruz de Berral, del que tomaron posesión en 1664. Como es lógico, la construcción de la iglesia es más tardía, posterior a las dependencias conventuales, dándose por concluida su ejecución en 1705, aunque estuvo cerrada al culto hasta la conclusión de su ornamentación en 1759.

Cúpula antes de la restauración.

Cúpula restaurada.

A pesar de estar consagrada a la Virgen de la Asunción, en 1890 la imagen del Señor de la Humildad y Paciencia, titular de la Cofradía de igual nombre y cuyas reglas datan de 1664, es trasladada desde la ermita de la Caridad, que amenazaba ruina, ocupando desde entonces el camarín central del retablo mayor.

A comienzos del siglo XXI unas filtraciones de agua derivadas de un depósito perteneciente a una vivienda particular sobre la cúpula del camarín, dañaron inmensamente no sólo las pinturas y lienzos que forman parte del mismo, sino la propia estructura de la cúpula. Solventado el riesgo estructural, quedaba pendiente la restauración de las pinturas, cuya ejecución únicamente fue posible gracias a los desvelos de la Cofradía del Señor de la Humildad y a la implicación de la Excma. Diputación de Córdoba, particularmente de su Diputado de Cultura, Antonio Pineda Bonilla, firmando ambas instituciones en 2013 un convenio de colaboración para la restauración integral y por fases de esta obra de arte.

Los trabajos estuvieron dirigidos y ejecutados por el restaurador José Manuel Cosano Cejas, quien entre 2014 y 2015 procedió a la consolidación, limpieza y reintegración de las pinturas de la cúpula, que fueron concluidas el martes veinticuatro de febrero de 2015. A continuación se reintegraron los muros y paramentos del camarín y, finalmente, el conjunto de cuatro lienzos que completan su decoración: la Coronación de la Virgen, la Dormición, una escena de la Huída a Egipto y otra de una Parada en la Huída a Egipto.

Tanto las escaleras de subida al camarín como el propio suelo de éste, conformado por losas de barro y azulejos con distintas representaciones, es el original tal y como fue concebido por la orden alcantarina para esta joya del barroco pontanés.

Fuente: Javier Villafranca Muñoz

Camarín del Humilde

Iglesia de la Asunción